miércoles, 30 de enero de 2019

Audiencia de indígenas presos injustamente se retrasa…por falta de intérprete

Audiencia de indígenas presos injustamente se retrasa…por falta de intérprete


Teotihuacán en Línea. La falta de un intérprete de la lengua náhuatl ha impedido la celebración de una audiencia judicial en la que se definirá el futuro de los seis indígenas de San Pedro Tlanixco, encarcelados desde hace quince años y medio por la muerte de un empresario floricultor de origen español.
En esa diligencia, el juez primero en materia penal de Toluca con sede en el penal de Santiaguito, en este municipio, cumpliría la resolución de un magistrado del Poder Judicial mexiquense, que hace doce días resolvió la reposición del proceso desde su inicio.
Pero también en esa audiencia, el ministerio público de la Fiscalía General de Justicia podría desistirse de la acción penal en contra de los pobladores de Tlanixco para atender el exhorto que hizo el viernes pasado el Congreso del Estado de México.
El Poder Judicial mexiquense lleva días consiguiendo un intérprete en náhuatl, pero a la fecha no lo ha encontrado, lo que ha retrasado la celebración de la audiencia. El abogado de los presos, Antonio Lara, consideró que esto representa una nueva violación a las garantías de sus representados señalando que el Estado Mexicano está obligado a proporcionar a sus clientes, la asistencia de un intérprete náhuatl y no un traductor, lo antes posible.
El pasado 17 de enero, un magistrado de segunda instancia del Poder Judicial mexiquense resolvió dejar sin efecto la sentencia de cincuenta años de prisión en contra de tres de los seis indígenas al comprobar que hubo irregularidades en el juicio que se les instruyó durante once años; además de que no existen elementos de prueba contundentes que sustenten una condena de esta magnitud, aunado a que durante el proceso los indígenas no contaron con la asistencia de un intérprete de su lengua originaria.

A los indígenas de San Pedro Tlanixco se les acusa de la muerte del empresario español Alejandro Isaak Basso, que representaba a un colectivo de floricultores del municipio aledaño de Villa Guerrero

1 comentario:

Anónimo dijo...

Pura maldita corrupción, si de verdad existiera la justicia estas personas no tendrían porque haber gastado tantos años de su vida encerrados solo por no contar con dinero