sábado, 29 de junio de 2019

Pueblos Mágicos ¿pueden perder el nombramiento?

Pueblos Mágicos ¿pueden perder el nombramiento?


Teotihuacán en línea. A raíz del otorgamiento del nombramiento de Pueblos Mágicos a los municipios, diversas ideas se han consolidado en torno al concepto de Pueblos Mágicos.
Además de los recursos económicos que ingresan a los ayuntamientos, Pueblos Mágicos debe mantener un estándar y una idea turística.
La idea
La creación de los “pueblos mágicos” data de 2001. La idea fundamental era que los turistas aprovecharan su estancia en algún centro turístico de ciudades o playas, para conocer poblados atractivos en los alrededores, o que los turistas carreteros se vieran tentados a detenerse en alguna o varias localidades que se encontraran a su paso.
El origen
Originalmente eran cinco las condiciones que debía reunir un sitio para entrar al programa: estar cerca de un destino turís­tico grande; contar con accesos razonables por carretera; poseer algún atractivo histó­rico o religioso; que la población estuviera dispuesta a participar; que contaran con tiendas de artesanías, restaurantes y comer­cios para que la localidad se beneficiara con el gasto de los potenciales visitantes.
El programa inició con el nombramiento de los tres primeros “Pueblos Mágicos”: Huasca de Ocampo, en las montañas de Hidalgo; Real de Catorce, pueblo minero casi fantasma de San Luís Potosí, y Mexcal­titán, una diminuta isla lacustre de Nayarit. No obstante, Mexcaltitán fue expulsado del programa por la Sectur en 2009.
El dinero
Cuando una localidad ingresa al programa recibe varios “beneficios”: fondos federales y estatales, además de obras por las que no paga. Para el rescate de su imagen urbana se pintan las fachadas de las casas, se remozan las principales calles y la CFE quita los cables de electricidad aéreos y los convierte en una red subterránea.
Además, se rescatan sus monumentos patrimoniales, recibe ayuda para desarrollar productos turísticos; a reordenar el comercio informal; se hace un plan de desarrollo; se capacita a la población; y se incluye en los planes de comercialización y promoción.
El candado
Todas estas ventajas despertaron el apetito de los estados por tener varios “Pueblos Mágicos” y rápidamente, a Sectur, que abrió una convocatoria, le llovieron materialmente solicitudes. Sin embargo, las autoridades federales se mostraron cautelosas y estrictas, lo que desembocó en que el programa creciera lentamente. Así, en poco tiempo se convirtió en uno de los proyectos más sólidos y exitosos de la Sectur.
De 2001 a 2009, cada año sólo se nom­braron unos cuantos,  para promediar 3.5 “Pueblos Mágicos” anual­mente y dar un total de 32. Pero en marzo de 2010, Gloria Guevara, proveniente de la iniciativa privada, fue nombrada secretaria de Turismo y las cosas cambiaron.
En su primer año al frente de Sectur fueron nombrados cinco nuevos “Pueblos Mágicos”, con un posterior incremento exponencial. En 2011 la cantidad se elevó a once, con lo cual la cifra llegó a cuarenta y ocho.
¿Pierden la magia?
En el 2010, Gloria Guevara recibió la Sectur con 32 “Pueblos Mágicos” y en menos de tres años nombró otros 51, para entregar el gobierno con un total de 83.
Para Alejandro Morones, ex subsecreta­rio de Operación de Sectur y secretario de Turismo de San Luís Potosí, cuando Real de Catorce ingresó al programa, el crecimiento desmedido de los “Pueblos Mágicos” en los dos últimos años del sexenio de Felipe Calderón se debió a presiones políticas de los gobernadores y presidentes municipales “Para subirse a un programa federal y buscar recursos”.
Por su parte, el entonces director de una empresa transnacional que opera en México, a mediados de 2012 se quejó de que, por razones políticas, “Estaban prostituyendo al programa”, ya que muchos de los que estaba nombrando Gloria Guevara no reunían los requisitos.
En diciembre de 2012, cuando inició la administración de Enrique Peña Nieto, y Claudia Ruiz Massieu llegó a su oficina para despachar como nueva secretaria de Turismo, lo primero que se encontró fue la crisis en que su antecesora había dejado al programa.
El alcance
“Pueblos Mágicos” es un programa que abarca, en sus 83 localidades, a una población de cinco millones de habitantes. En total cuentan con 866 hoteles (la mayoría pequeños, incluyendo casonas y haciendas), que suman veintiún mil habitaciones, de las cuales nueve mil 140 se concentran en tan sólo diez poblados.
En ese contexto, una de las primeras acciones que ordenó Ruiz Massieu fue poner en pausa el programa. Al mismo tiempo, encargó un diagnóstico a una consultoría para dictar nuevos lineamientos. Trascendió que el estudio ya fue entregado a la Sectur, mismo que está en proceso de revisión en la oficina del subsecretario de Innovación y Desarrollo Turístico.
Perder el nombramiento
Las localidades incorporadas al Programa, pueden perder esos recursos y el título.
Para mantener su nombramiento como Pueblo Mágico, deberán de obtener la renovación del mismo cada año, esta contará con la revisión de cumplimiento de los Indicadores de Evaluación de Desempeño y de los Criterios Certificación del Programa, por lo que deberán de cumplir con los requisitos de institucional y gobierno; patrimonio y sustentabilidad; económico y social; y de turismo.
Dentro del programa las autoridades estatales y municipales que hayan solicitado la incorporación comprometen una aportación económica de cuando menos tres años para la realización de las acciones, proyectos y programas de trabajo que se encarguen del beneficio comunidad-autoridad.
El 26 de septiembre de 2014 fueron publicados los lineamientos, en el Diario Oficial de la federación.
sustentabilidad
competitividad
tecnologías de la información
transversalidad
Por lo que para retener u obtener el título de “Pueblos Mágicos” estos deberán cumplir con la convocatoria publicada por SECTUR misma que les regulara el proceso esto con el fin de medir su progreso y correcta aplicación del mismo

No hay comentarios: