Enrique Peña Nieto asistió a la ordenación episcopal de monseñor Juan Odilón Martínez García como obispo de Atlacomulco

Enrique Peña Nieto asistió a la ordenación episcopal de monseñor Juan Odilón Martínez García como obispo de Atlacomulco

Teotihuacan en Línea. Teresa Ortiz. Atlacomulco. Enrique Peña Nieto expresó, al asistir a la ordenación episcopal de monseñor Juan Odilón Martínez garcía como obispo de Atlacomulco, que en un clima de respeto y colaboración institucional, cada quien en su misión y tarea encomendada “podamos seguir trabajando para lograr que la sociedad mantenga su unidad, cohesión y, sobre todo, el respeto a los más altos valores”.
Al participar en la comida en honor a monseñor Juan Odilón Martínez García, para celebrar su ordenación episcopal y toma de posesión como Obispo de Atlacomulco, el gobernador agregó que en lo que hace a nuestra respectiva responsabilidad y tarea, tienen mucho de común: “primero, en lo suyo que es más en el ámbito de lo espiritual y la nuestra, que es en el ámbito de lo material, a final de cuentas buscamos y tenemos objetivos comunes, que es propiciar condiciones de mejora, de paz y de tranquilidad a la ciudadanía, a la feligresía en su caso, a la grey, a la que usted esta pastoreando.”

En el acto donde estuvieron presentes el arzobispo Christophe Pierre, nuncio Apostólico en México; el cardenal Francisco Robles Ortega, arzobispo de Monterrey; el arzobispo Carlos Aguiar Reyes, presidente de la Conferencia del Episcopado Mexicano; Ricardo Guizar Díaz, arzobispo emérito de Tlalnepantla y primer obispo de Atlacomulco; el arzobispo Alberto Suárez Guindas; Felipe Arizmendi Esquivel, obispo de San Cristóbal de las Casas; Carlos Garfías Merlos, arzobispo de Acapulco; Javier Chavolla Ramos, obispo de Toluca; Maximino Martínez Miranda, obispo de Ciudad Altamirano; así como Marcela Velasco González, secretaria de Desarrollo Urbano; Fidel Almanza Monroy, presidente municipal de Atlacomulco; Roberto Herrera Mena, coordinador de Asuntos Religiosos, entre otros.
Peña Nieto recordó que ya existía una amistad entre él y el nuevo obispo de Atlacomulco, ya que se conocieron cuando el gobernador era un niño y el religioso iniciaba su misión pastoral como vicario parroquial de la cabecera municipal y, ahora, se reencontraban cada uno con importantes responsabilidades en sus respectivas actividades, donde “buscamos que encuentre cada quien el mejor espacio, el mejor ambiente, condiciones propicias para lograr metas personales y de trascendencia.
Durante el acto tanto el obispo Martínez García como el presbítero Juan Carbajal Sánchez expresaron citas bíblicas con temas relativos a la toma de posesión del nuevo pastor de la iglesia católica en la región norte del Estado de México