martes, 31 de mayo de 2022

La Toluca-Naucalpan bloqueda por recolectores de basura privados, ayer


La Toluca-Naucalpan bloqueda por recolectores de basura privados, ayer

Teotihuacán en Línea/Edomex en Línea. Xonacatlán. Recolectores de basura privados bloquearon ayer la circulación en la carretera libre Toluca-Naucalpan , a la altura de la Prepa 3 del municipio de Xonacatlán, en protesta por la clausura  que hizo el gobierno mexiquense, del relleno sanitario de San Miguel Mimiapan.

De su lado, los gobiernos municipales de Otzolotepec y Xonacatlán lanzaron avisos a la ciudadanía, en los que informan que no habrá servicio de recolección de basura, debido a que “El tiradero no está en operación”.

Las autoridades municipales indicaron que los ayuntamientos enfrentan severos problemas financieros que les impiden destinar más recursos para llevar la basura a otros sitios.

La mañana del sábado, la Procuraduría de Protección al Ambiente del Estado de México, (Propaem), dependiente de la Secretaría del Medio Ambiente del gobierno estatal informó que el relleno sanitario ubicado en San Miguel Mimiapan, en Xonacatlán fue clausurado debido a que en una visita de inspección, los encargados del lugar no pudieron exhibir los dictámenes de impacto ambiente para poder operar este sitio.

Lo anterior, no solo generó que el relleno fuera cerrado en sus operaciones sino que para abrirlo, se deberá pagar una cuantiosa multa y contar con los dictámenes de impacto ambiental.

En este sitio, se dispone de los residuos que se generan en varios municipios del Valle de Toluca, como la propia capital mexiquense, Otzolotepec, Xonacatlán, Temoaya, Huixquilucan y hasta recibe basura de la Ciudad de México.

Los operadores de los camiones recolectores se quejaron que el cierre del tiradero les implica una merma económica muy grande, además de que colocaron mantas que señalan que “los xonacatlenses no pagaremos ni un peso más por tirar la basura en otro lado”.

En este tiradero se depositan, en promedio, mil toneladas de basura diariamente, aunque en un inicio, se proyectó que solo recibiría 600 toneladas. Esto generó que un grupo de ambientalistas promoviera un amparo para impedir la operación del sitio, recurso que llegó hasta la Suprema Corte de Justicia de la Nación, quien en abril del año pasado, la Sala Primera de la Corte determinó que este relleno sanitario no cumplía con las normas ambientales, de tal forma que urgió a las autoridades municipales y estatales a obligar a los dueños del lugar a generar un plan de regulación y manejo para poder operar y en caso de no contar con él a la brevedad, el sitio debía ser clausurado

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