Teopancazco Teotihuacan tuvo diversidad en grupos étnicos
Etnias pudieron practicar canibalismo: Especialista
Puebla, Veracruz, Tlaxcala, Hidalgo y Guerrero, entre los grupos
Teotihuacan en línea. INAH. La arqueóloga Linda Rosa Manzanilla Naim anunció una diversidad de grupos étnicos en la zona de Teopancazco, en Teotihuacan.
La especialista indicó que la ausencia de textos grabados que describan el funcionamiento de la antigua urbe teotihuacana, la ha llevado a utilizar técnicas de otras disciplinas para confirmar la multietnicidad, dieta y los trabajos desarrollados en un centro de barrio teotihuacano.
“Teopancazco es el mejor ejemplo de la multietnicidad, porque tiene a los mejores expertos de varias regiones de Mesoamérica colaborando para entender cómo se forjó esa ciudad como una maravilla, para hacer
Con ayuda de investigadores de los institutos de Geofísica y Geología de
La doctora adscrita al Instituto de Investigaciones Antropológicas de
Los análisis en los pórticos, patios y plazas del sitio también la llevaron a considerar que los barrios eran la parte más dinámica de la sociedad teotihuacana. “Casi no estaban controlados los barrios por el Estado; traían mano de obra, movían sus caravanas por corredores a las regiones de donde transportaban materias primas y productos suntuarios, y donde seguramente hicieron alianzas”.
La arqueóloga mencionó que todos estos resultados apoyan su teoría de que Teotihuacan fue la excepción en Mesoamérica. “Fue una urbe con una estructura corporativa, en la que posiblemente había cuatro cogobernantes y por lo menos uno debía venir de otro sitio, pues protegía los intereses de toda la gente que llegaba de fuera”.
La ocupación del barrio de Teopancazco comenzó hacia el año 150 d.C. y duró hasta 600 d.C. Su riqueza la formó intercambiando mantas de algodón, moluscos marinos, pigmentos y cosméticos para las pinturas faciales.
“El centro de barrio tiene un fuerte vínculo con el estado de Veracruz, con la zona de Nautla; en Teopancazco contamos con la mayor variedad de peces hallados en Teotihuacan, además de cocodrilos, cangrejos y tortugas”.
La experta refirió que encontraron agujas, alfileres, punzones de hueso y botones de concha, que dan cuenta de que en ese barrio hacían los trajes para la elite que regía. “Probablemente las mantas sin armar las intercambiaban con las elites de otros barrios, pero los elementos marinos eran solamente para Teopancazco, como lo muestra el famoso mural del sitio”.
Al abundar sobre el funcionamiento de los centros de barrio, la investigadora de
“La tercera parte de los entierros de Teopancazco es de recién nacidos y muchos están ubicados en el sector noreste del conjunto; esto quiere decir que nacían y quizás como las condiciones higiénicas no eran las adecuadas, morían al momento del parto y los enterraban ahí, porque encontramos 22 entierros.
“Hubo un ritual masivo consistente en colocar una cabeza en cada vasija y taparla con otra, es un rito veracruzano porque hallamos otro idéntico en Cerro de las Mesas, Veracruz; tenemos a 29 individuos decapitados en un mismo momento hacia el año 350 d.C. Hay otros infantes de entre tres y ocho años de edad, algunos de los cuales yacen bajo altares y otros en fosas. Por último, hay entierros parciales, y algunos adultos sedentes completos”, señala.
Al referirse a los decapitados, la especialista mencionó que muchas de las personas que llegaron a Teotihuacan, nunca regresaron a sus lugares de origen, porque fueron desmembradas, descabezadas e incluso sus huesos transformados en instrumentos de trabajo, agujas, alfileres y otros más fueron procesados, lo que se aprecia por las huellas de corte y hervido que dejaron en los restos.
“Probablemente había algo de canibalismo, no sé si ritual, pero gracias a los análisis de isotopos estables descubrimos que había individuos que tenían varios niveles tróficos con nitrógeno muy negativo, lo que nos hace suponer que comían carne humana de manera constante; son pocos, pero algunos sí lo hacían. Se encontró en dos de los entierros más prestigiados de la elite del centro de barrio”.
Añadió que gracias al estudio de los isotopos estables, hecho en el Instituto de Geología de
“Además descubrieron, gracias a un análisis de la antropología física, quiénes eran las personas que cargaban pesos, quiénes eran sastres y cosían, y quiénes ablandaban las fibras con los dientes y sufrieron desgaste en incisivos”.
Linda Manzanilla fue reconocida recientemente con el Premio Alfonso Caso a la mejor investigación arqueológica que otorga el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), por su trabajo Estudios arqueométricos del centro de barrio de Teopancazco en Teotihuacan
7 comentarios:
Me parece haber escuchado,que los teotihuacanos llegaron a guardar a los cerdos como una especie rara
Controlaban muy bien el exceso de población
todo por Tlaloc
es sorprendente pensar que consumian carne humana
Esto fue por maestros Africanos la llegada de un Africano mas que Un Español
y de veras entregan todo lo que encuentran o solo lo mas feo o de menos valor para ellos
felicidades a La arqueóloga Linda cada día vamos conociendo mas de nuestros antepasados
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