jueves, 19 de diciembre de 2013

Mi cartita

Mi cartita


Teotihuacan en línea. Artículo de José Luís Hernández Jiménez. Es que, estimados lectores, ya no sé ni a quien escribirle, para pedirle mis deseos para el país. Desde hace muchos años, le he mandado textos al Presidente, a los legisladores, a los Partidos, a otros integrantes de la clase política, y nada. Son una bola de insensibles. El asunto les vale gorro.
Por eso, ahora dígome a mi mismo, “mi mismo: pues mándale tu cartita a Santa Clos, con copia a los Santos Reyes, a ver si ellos sí hacen caso”. Mi cartita va a concluir diciendo: “quiero que el Salario Mínimo General (SMG) de mi país, por jornada laboral de 8 horas, que ahora es de 67 pesotes diarios, sea como el de los gringos, o sea, de 560 pesos al día”. ¿Será mucho pedir?
Y si no se puede, pues aunque sea, que el nuevo SMG, el que estará vigente a partir del primer día de 2014, logre recuperar su poder de compra, perdido durante los últimos 40 años. Si así fuera, dicho nuevo SMG, debería de ser de 250 pesos al día.
Como a todos consta, la carrera entre precios y salarios, iniciada en diciembre de 1970, ha sido ganada, una y otra vez, por los precios de todo. Todo aumenta sustancialmente, menos los salarios de la gente más amolada, que es la mayoría. Y es que los ganadores y sus ayudantes, hicieron trampa desde el principio: comprando a los jueces, permitiendo que los precios se adelantaran desde la misma meta de salida, poniendo obstáculos a los salarios, abucheándolos, descalificándolos sin razón alguna, frenándolos.
¿Se acuerdan?
Fue el Presidente Luís Echeverría Álvarez, LEA, (ídolo de algunos izquierdistas de hoy) quien, al comenzar su mandato, puso el desorden, devaluando el peso, cosa que provocó el inmediato aumento de precios de muchos artículos, autorizando el incremento del precio del azúcar, situación que provocó más aumentos de precios.

El mismo Presidente, intentó poner remedio a su caos provocado por el mismo y decretó un aumento salarial. Los empresarios lo acataron pero aumentaron los precios. LEA volvió a decretar otro incremento salarial y los empresarios volvieron a aumentar los precios de sus productos. Otro aumento salarial y más aumentos de precios. A cada aumento salarial decretado, correspondía muchos aumentos de precios y etc., etc.
Así terminó su mandato Echeverría. La economía hecha un caos y la economía familiar hecha pedazos.
Al designar, en 1976, a su sucesor – así es, en ese entonces, en los hechos el Presidente designaba a su sucesor – LEA optó por su Secretario de Hacienda quien, además, era su amigo del alma, José López Portillo, JLP, argumentando que él sí sabia de economía. Pero el amigo que sí sabia de economía, no solo consolidó el caos sino que lo empeoró. Y los precios de todo, en definitiva tomaron la delantera en la carrera contra los salarios. JLP, impotente y llorando lágrimas de cocodrilo, terminó su mandato designando a su Secretaria de Programación y Presupuesto, Miguel de la Madrid Hurtado, MMH, porque “él sí sabia de finanzas”.
¡Ay nanita! Así ha de haber dicho el Fondo Monetario Internacional (FMI), organismo que daba el aval para los préstamos que los gobiernos mexicanos, perdidos en su caos, pedían una y otra vez, a la banca internacional empeñando hasta el cuerpecito (del país, claro) pues a la primera petición de otro préstamo del gobierno de don MMH, los directivos del Fondo, le dijeron “primero le firmas que vas a poner orden en tu economía y luego te prestamos. Es más, te vamos a decir lo que tienes qué hacer y…primero que nada: ¡ya no aumentas los salarios y…”. Los aumentos salariales fueron perdiendo ímpetu, velocidad, monto.  Y hasta la fecha, mis estimados.
En estos momentos, los encargados de autorizar los aumentos salariales de cada año, o sea, los integrantes de la Comisión Nacional de los Salarios Mínimos, que no creo que ganen el salario mínimo, han dejado ver que el aumento para 2014, será del 4 por ciento, algo así como dos pesotes con cincuenta centavos, por día, ó 75 pesos al mes. Ese aumento, no servirá ni para resarcir el daño mayúsculo que está ocasionando en los bolsillos de los capitalinos el reciente aumento a la tarifa del Metro, que fue del 66 por ciento, por ejemplo. Y en provincia es peor. Los salarios – en general los salarios de los trabajadores de la ciudad y de campo - alcanzan para adquirir cada día, menos artículos. Fíjense que hoy, si utilizamos un salario mínimo general para comprar solamente tortillas, alcanza para casi 6 kilos. Pero hace 40 años, con un salario mínimo se podían comprar casi 15 kilos de ese alimento básico del mexicano ¡!.        
Por todo esto que les digo mis estimados, a Santa Clos, con copia a los Santos Reyes, mandaré mi cartita de peticiones para el país, en la que les pido, les solicito, les ruego, que el aumento salarial logre al menos, recuperar su poder de compra perdido en los últimos 40 años. ¿O entre todos lo hacemos, va? ¿Y qué hacemos con los encargados de la política salarial, que son un verdadero fracaso?
Notitas: Una.- Que el Presupuesto de Egresos del DF, para el 2014, será de 156 mil 837 millones de pesos. A ciencia y Tecnología le tocó un aumento del 0.9 por ciento; a Educación le toca un aumento del 1.6 por ciento; a Salud un incremento del 0.3 por ciento,… ¡tan poquito! Dos.- Que si MORENA quiere entregar en tiempo y forma, para su revisión a cargo del IFE, sus documentos para solicitar su registro electoral, debe afiliar de aquí al 31 de enero, a 2511 ciudadanos por día. Y si no lo hace pues…que luego no se queje. Tres.- Que “con la reforma energética bajará tu recibo de luz, …pagaremos menos en la cuenta de gas,…se crearán 100 mil empleos cada año, …y bien pagados”. Así dice la propaganda de los representantes del gobierno. Yo veo que la nariz les crece y crece y crece. Cuatro.- Que Feliz navidad y feliz año nuevo

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