miércoles, 12 de noviembre de 2008

San Martín de las Pirámides: La glorieta de los dioses


San Martín de las Pirámides: La glorieta de los dioses

Teotihuacan en Línea. El aroma del copal y las danzas ancestrales parecían determinar el beneplácito de Quetzalcóatl y Mayahuel desde el mictlan de los dioses teotihuacanos. Ahí en pleno suelo teotihuacano, en San Martín de las Pirámides, la glorieta erigida en honor a la cultura prehispánica, que embellece desde ahora el centro del municipio, se nutría a sí misma de luz y vida ante el sonido de los tambores y la emoción de la gente. Bello escenario que inicia y eterniza la belleza mítica de los dioses y la cultura en suelo ancestral. Magnífica obra arquitectónica que demuestra que los tiempos justos de los gobernantes teotihuacanos han regresado, mediante los valores de la nueva democracia.
El pueblo manda, y demandó un monumento que hablará de nuestras raíces. Que hablara, por sí mismo y no con palabras, sino con belleza, de la tradición e importancia de san Martín de las Pirámides. El esplendor del municipio, allegado a la zona de las imponentes pirámides, brilla nuevamente desde la belleza urbanística, que muestra la belleza humanista de los sanmartineses.
Los tambores se apagan. Quedan los aplausos y las palabras de inauguración. Queda el evento de apertura y el inicio del misticismo contemporáneo, preparado y listo para el corredor turístico, para la visita de fuera, para el disfrute y orgullo de los sanmartinenses.
El presidente municipal de San Martín de las Pirámides termina el discurso de obertura y la glorieta queda ahí, en su magnificencia iluminada.
Halagando a los dioses teotihuacanos.
Dignificándose para el turismo que viene…
enorgulleciéndose de ser sanmartinense.
Teotihuacan en Línea.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

un orgullo ser sanmartinense. no nos equivocamos.

Anónimo dijo...

los dioses teotihuacanos aman a los de san martin

Anónimo dijo...

estas son las cosas que nos dan nombre, hacer algo entre todos y entre todos ser orgullosamente sanmartinenses