¿Corona qué?

¿Corona qué?

Teotihuacán en Línea. Alejandro Melgar. Estas últimas semanas se ha suscitado un caos mundial por el famoso Coronavirus (COVID-19) la enfermedad de la que todos hemos escuchado que si te da, ya mejor ve pagando tu lugar en el panteón más cercano que encuentres, porque no la vas a librar. Bueno pues esta situación ha hecho que el mundo entre en pánico, que países de primer mundo tomen medidas de extrema seguridad para evitar que su gente se infecte y así evitar a toda costa el mayor número de bajas. En algunos países generaron la cuarentena obligatoria, otros la desinfección a gran escala por las ciudades de mayor población, hasta China hizo un hospital en tiempo record (En espera de su Record Guiness) ¿Y México?, pues ahí les va.

México como el país futurista que somos, pues tenemos el “detente” que nos regaló nuestro queridísimo cabecita de algodón. Para quien no sepa que es el “detente” es un escapulario de protección religiosa (si eres ateo ni modo, ya tienes coronavirus). Obvio, no hay mejor manera de combatir una pandemia que con una oración católica… ¿No?

No estoy en contra de las creencias de las personas, pero recordemos que es un país laico (o al menos lo era); es triste esta situación ya que se toma a la ligera un tema tan importante y que nos puede afectar a todos y como buenos mexicanos ahí vamos siempre a hacer lo contrario. Sabiendo que ya existía el riesgo de infección en México, no tuvieron mejor idea muchas personas que irse a parrandear al evento Vive Latino. Es más, hasta nuestro presidente recomendó que la mejor manera para evitar rumores del COVID-19 es abrazándonos todos, como buenos compatriotas que somos.

Dejando de lado nuestros problemas nacionales, el Coronavirus no es tan letal como creemos, a menos que tengas problemas respiratorios. Eso no quita el hecho que nos echemos una mano entre todos siguiendo las medidas de salud necesarias, usar un tapabocas en lugares concurridos, lavarse las manos frecuentemente y tratar de mantenernos en cuarentena, así evitamos un problema más en nuestras vidas. Recuerden que es cuarentena, no vacaciones, así que tómenlo con la precaución necesaria.

Y pues ni modo, a quedarse en casita viendo películas de pandemias y zombies.

Hasta aquí su amigo y servilleta